Herland Vaca Díez



Herland Vaca Díez - "El Comité puede ser un instrumento de cambio"

Presidente del Comité Civico Pro Santa Cruz


M21: ¿Qué debe cambiar en Santa Cruz? ¿O todo está bien? 

HVD: Todo está bien (risa)… Siempre se debe cambiar, siempre hay algo que cambiar. Decir que todo está bien sería una forma estática y de mucha conformidad de ver las cosas. Santa Cruz debe mejorar en muchas cosas, mas yo soy tremendamente optimista. Santa Cruz ha ido creciendo y se ha desarrollado bastante bien. Hemos soportado bastante bien una carga social, económica y política occidental muy grande. Pocas son las ciudades y regiones en el mundo que han crecido tanto como Santa Cruz, al mismo tiempo que hemos mantenido los índices económicos y de desarrollo humano en paz y armonía. Fíjese que todos los disturbios y la violencia que se ha generando en territorio cruceño no la hemos generado los cruceños. 

A todo esto debemos mejorar la educación fundamentalmente. Yo creo que Santa Cruz debe optar por el conocimiento. Las universidades deben enseñar conocimiento moderno y sobre todo, producir investigación ajustada a la ciencia. Si nosotros tenemos buena salud, educación y todos los elementos básicos que necesita para vivir el ser humano podemos esperar que la sociedad civilizada viva en armonía democráticamente. La formación universitaria tiene que estar dirigida a resolver los problemas y necesidades de la región y el pueblo. Los países que hacen énfasis en las ciencias exactas, que tienen muchos matemáticos e ingenieros, resuelven mejor sus problemas y tienen mejores niveles de desarrollo. Nosotros nos dedicamos mucho a hacer ciencias sociales, y desde el punto de vista de los hechos resuelve muchas cosas pero nos hace falta potenciar el ámbito de las ciencias exactas. También, quisiera que en Santa Cruz caminemos hacia una mejor justicia. Para esto es necesaria también la educación, para que el poder político y económico no sean tan prevalentes en la justicia y tenga preponderancia el mérito. Es decir, que las personas valgan por su conocimiento, iniciativa y capacidad para transformar la sociedad.

M21. ¿Cómo ve el Comité Pro Santa Cruz el accionar de los empresarios cruceños en el actual contexto político?

HVD: La verdad yo no me puedo poner en el lugar de ellos, pero puedo decir como lo veo desde mi posición de ciudadano. En general los ricos —y lo que uno ve— es que en la vida uno puede optar por diferentes caminos. Uno de los caminos que a muchas personas les da satisfacción y toman como su fi n es el ‘tener’, mas yo creo que todos debemos preocuparnos por ‘ser’. Tenemos que ‘ser’ completos. Creo que a un rico se le puede perdonar cualquier cosa menos que no tenga sabiduría. Queda feo alguien que tiene mucho y que no tiene conocimiento y sabiduría. Entonces, veo que falta eso, que las personas y los cruceños se han preocupado mucho en ‘tener’ más que en ‘ser’. Eso ha desencadenado en lo que habíamos dicho antes, que lo que vale es el poder político y poder económico, y no el poder de los méritos, el poder del ‘ser’.


M21: ¿Considera usted que las actuales organizaciones políticas cruceñas con representación están logrando acompañar los procesos de transformación social del departamento?

HVD: No, para nada. Ya lo dije antes y eso produjo algunas reacciones de rechazo y crítica hacia mi persona por parte de algunos políticos jóvenes. Pero la intención no es criticar, no es cuestión de estigmatizar a ninguna clase política, menos a algunos específicamente. Lo que pasa es que los cruceños no teníamos ejercicio y experiencia en esos ámbitos y escenarios, y los tenemos que desarrollar. Con la autonomía o la participación popular se cometieron muchos errores, hubo muchos deslices, pero ya vamos adelante.

M21: ¿Considera que las logias como actores de poder mantienen sus espacios en instituciones cruceñas?¿Esto le hace bien o le hace mal a Santa Cruz?

HVD: Creo que las logias mantienen su poder sobre muchas instituciones y muchos ámbitos de la sociedad cruceña. Sin embargo creo que habría que analizar dentro de la lista de los ‘logieros’, ¿quiénes son?, ¿cuánto tienen los ‘logieros’?, ¿son empresarios?, ¿son terratenientes? Lo lamentable y que da mala impresión es que se han preocupado mas por tener que por ser. Han trabajado en beneficio de sectores o grupos y no en beneficio de todas las regiones. Se han preocupado más por tener el control de instituciones cuando deberían más bien tratar de dirigir, ser los líderes y decirnos a todos el camino que debemos seguir, un camino para todos. Creo que la pérdida de visión de región, de futuro, de progreso y de bienestar para todos es producto de aquello. Otra cosa que siento negativa en cuanto a los grupos de poder secretos es su jerarquía, ese ‘no dejar que surjan líderes’. Lo que más vale del ser humano es el ser inteligente, el de tener iniciativa, el de tener inventiva, la capacidad para generar nuevas alternativas, al hombre no se le puede poner atajos, no se le puede poner límites.

M21: ¿Cuál cree que ha sido el aporte de los migrantes a Santa Cruz?

HVD: Creo que el mayor aporte de los migrantes a Santa Cruz —independientemente de su procedencia—, ha sido como mano de obra y fuerza de trabajo, que después en el tiempo ha sido más calificada y hoy ya tenemos aporte intelectual y profesional. Creo que es un mérito de Santa Cruz porque una de las cualidades que tienen grandes ciudades como San Pablo, Londres, París u otras, es la de aprovechar lo mejor de las personas, de donde vengan. Santa Cruz es una ciudad universal. Es un departamento abierto, con espíritu tolerante, solidario, con paradigmas modernos de aceptación, de cambio y desarrollo. En ese sentido Santa Cruz es revolucionaria porque no tiene mayores problemas, no se incomoda, ni sufre con la migración. 

Si bien la migración nos ha afectado en algunos aspectos ideológicos dirigidos con cierta intencionalidad y cierta aversión contra Santa Cruz, estos han sido circunstanciales. Santa Cruz ha absorbido las culturas

y ha sacado —y ojala que siga sacando— lo mejor de donde sea que venga. En cuanto a la migración oriental por ejemplo, no tenemos mayor dificultad porque es la misma cultura. El problema aparece cuando se quieren establecer choques culturales, y a estos choques Santa Cruz los ha sabido amortiguar muy bien. En Santa Cruz, por ser tan rica, los migrantes encuentran desarrollo y progreso, y si nosotros a esas personas le dedicamos mayor esfuerzo, mayor trabajo, y se le educa, ellos serán unos futuros buenos cruceños.

M21: ¿Estaría de acuerdo que un migrante presida el comité cívico en la próxima gestión?

HVD: En cuanto a incorporar al Comité Pro Santa Cruz, solamente hay que tener el siguiente cuidado: que sean personas que amen a Santa Cruz. Que amen y que conozcan. Porque solo se ama lo que se conoce y solo se lucha por lo que se ama. Si son luchadores por que conocen y aman a Santa Cruz, entonces yo no encontraría ningún inconveniente para que nadie, hasta extranjero, pueda acompañar al Comité. En ese sentido si aceptaría que presida, siempre que pase esos prerrequisitos.

M21: ¿Qué actitud cree usted que debe tener el liderazgo cruceño en relación al gobierno nacional?

HVD: Este gobierno ha demostrado que tiene mucha saña contra el oriente. Nos ha agredido de diferente forma, nos ha estigmatizado de las peores maneras, ha querido dividirnos a los bolivianos y a los orientales. También ha corrompido. Usted ve que ‘unionistas’ se volvieron ‘masistas’. No estaría bien si a través del dinero consiga que un católico se vuelva musulmán. No ha existido un respeto a nuestra voluntad, nosotros votamos en contra de la constitución y votamos a favor de las autonomías. Ellos hicieron que voten en contra de las autonomías y de un día para el otro hicieron que voten a favor. Es como ser católico y musulmán al mismo tiempo. El gobierno tiene la habilidad de hacer a sus correligionarios musulmanes un día y católicos el otro, además de ser tremendamente centralista.


Creo que el comité no tiene que ser opositor, pero si tiene que luchar por los intereses regionales. En contra de todo lo que quiera mellar nuestros elementos identitarios, en contra de la religión, las lenguas, costumbres y símbolos que nos quieran imponer. Vemos como intencionalidades malignas hacia las personas y los pueblos lo que se hizo con Pando, lo que se está haciendo con el Beni y lo que se ha pretendido hacer con Santa Cruz. Entonces estos sucesos hacen que uno tenga una cierta animosidad contra el gobierno.

M21: ¿En 2015 seguiremos votando por los mismos en Santa Cruz o considera usted que es tiempo de renovación?

HVD: Hay que renovar. Santa Cruz tiene que renovar. Pero qué difícil es renovar cuando hemos tenido un gobierno tremendamente fuerte que politiza todo, y a la vez grupos de poder que también han controlado prácticamente todo, sumado a esto partidos políticos caudillistas con dueño. Así el nacimiento de líderes cuesta, pero estamos en un periodo de transición donde el sistema universitario ha crecido, el sistema educativo está bastante inmaduro todavía y se está por definir, pero hay muchos jóvenes, es decir, tenemos buena arcilla que no está seca, que está todavía húmeda y de la que van a surgir en los próximos días muchas artesanías. Muchas cosas hermosas surgirán de la juventud para diferentes piezas, lugares e instituciones que prometen mucho. Esto claro sin descartar las personas mayores tomando en cuenta su inteligencia y su conocimiento.

M21: ¿Cuáles son los desafíos personales y del Comité a futuro?

HVD: Yo tengo el desafío de colocar al Comité Pro Santa Cruz como una institución que sirva para Santa Cruz y Bolivia. Con una infraestructura moderna, con gente de pensamientos modernos y futuristas, y con proyectos para dar soluciones y sugerencias a las instituciones y al país. Existe una tarea interna, una tarea cruceña y otra en cuanto a mi persona con relación al Comité, mi región y el país. Estamos trabajando para que el Comité sea un instrumento válido todavía por todo este siglo más. Los cambios que se necesitan todavía van a demorar algún tiempo, pero tenemos que acelerar lo más que se pueda. De esta manera, si mantiene sus principios y valores, el Comité puede ser un instrumento de
cambio.